martes, 19 de agosto de 2014

Masaje Ayurvédico

Después de tanto templo, museos y demás, tocaba relajarse con un masaje ayurvédico. 
Por recomendación de Tusi, del que ya hablaremos más adelante, nos dieron uno en el centro "Athreya". 
Nunca había recibido un masaje tan completo, donde solo me faltara por masajear una parte y tres cuartos de mi cuerpo. Una de ellas no la diré por si hay niños pequeños leyendo, y  los otros tres cuartos restantes los omitiré por si los no tan pequeños, dejando su imaginación volar, piensan cosas que no fueron...Lo dejaré en que el masaje de glúteos se hizo aproximándose a partes nobles que un chico heterosexual no pretende  mancillar. 
Nunca me habían masajeado el bigote, los orificios de las orejas, las uñas, ni las durezas de los pies...
Terminado el masaje, nos metieron en una sauna llena de hojas, que parecian laurel, donde por un momento pensamos que ibamos a ser la cena ayurvédica del martes... 

Fuera coñas, el masaje fue una verdadera pasada, totalmente recomendable y a un precio algo más económico que cualquier masaje de este tipo en Madrid.

1 comentario:

  1. Despues de la subida al Monte Sigiriya os habrá venido genial. ! QUÉ GUSTO!

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